Debería haber sido un postre más fino, tipo vasito individual de tres chocolates, o helado de cava con mandarina y nueces de macadamia caramelizadas. Todo eso estaba en mente para la cena de nochebuena, pero no me podía resistir a estos cupcakes, así que el postre de este año ha sido para los niños, que disfrutaron como locos. ¿Cuantos me puedo comer? fue la frase de la noche.
Arbolitos de navidad, con y sin nieve. Son de crema de chocolate blanco. No llega a ser buttercream, porque lleva "solo" 100 gr de mantequilla. 2 tabletas de chocolate blanco, nata para montar, icing sugar (que es azucar glas pero aún más fina) que es lo que le da cuerpo y blanquea el choco y la mantequilla.
Los verdes llevan la punta de un palillito de colorante Wilton. No hay que poner más, porque luego sube.