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jueves, 2 de junio de 2016

¡Cumpleaños de pelotas!

Mi sobrino Rafa ha cumplido 14 años. Y sabiendo que le pierde el fútbol, pues me dije: tarta de balón al canto. Pero para esto hay que ser medio ingeniera o por lo menos tener algunos conocimientos básicos de geometría, y no es mi caso.
Me meto en Internet a ver el asunto: por lo visto, los balones se componen de pentágonos y hexágonos... He lavado unos cuantos, cuando los niños eran chicos y volvíamos de pasar la tarde en el parque, pero nunca me había fijado. Así que me hice con un pentágono y un hexágono con los mismos centímetros de lado, para que encajen. Por ahí iba bien. Me las prometía yo muy felices. Pero esto no encajaba. Por lo visto es que la dimensión del lado de las figuras, va en relación con el perímetro de la esfera. Y ese es un detallillo que yo, de letras, había pasado por alto.
Así que los pentágonos negros terminaron siendo poliedros irregulares, para cubrir los huecos que debían haber sido pentágonos. Es lo que tiene tirarse a la piscina reposteril sin flotador. Pero bueno, estaba rica, eso sí. Y de lejos, era un balón y hasta bonito
La rellené igual que la tarta de comunión para Jose, que como me habían dicho que estaba muy rica, tenía yo ganas de probarla. Aquí queda una foto del corte, donde se aprecia la crema de galletas lotus entre las capas de bizcocho de chocolate esponjoso y alguna que otra gotita de caramelo en el relleno (abajo en el centro).
Muchas gracias a mi cuñada Mª Carmen por las fotos que hizo y me mandó, que yo con el coraje de que no saliera perfecta, ni le hice fotos.
Sobrino y ahijado, te debo un balón en condiciones. Ya estoy matriculada en primero de ingeniería técnica. FELICIDADES GUAPO

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