Mantecados caseros

Si eres cocinillas, por lo menos en lo que a dulces se refiere (como yo) estas fechas son una ocasión perfecta para darte el gustazo de hacer tus mantecados caseros.

Además de que supone un ahorro considerable, tienen la ventaja de que los adaptas a tu gusto de dulce o de aderezos (canela, almendra, limón, chocolate...) y la satisfacción de lo hecho en casa no está pagada.





Ingredientes para 30 mantecados de almendra y canela

• 1/2 kg de harina normal (yo usé gallo) 
• 250 gr de manteca de cerdo. La hay en los super, pero mejor de carnicería
• 180 gr de azúcar glas. Si usas la normal se notará al masticar
• 1 cucharadita de canela en polvo
• 100 gr de almendras tostadas sin sal
• Semillas de sésamo

Lo primero es tostar ligeramente la harina, extendida en la bandeja del horno a 100º durante una media hora, removiendo de vez en cuando para que no se queme. No tiene que dorarse, solo perder algo de su blancura original. Mientras machaca las almendras en el mortero.

 Bate la manteca con el azúcar. Cuando esté ligada, añadir la harina ya fría poco a poco, y mezclada con la canela. Para termirar agrega las almendras trituradas. La masa debe quedar quebradiza, pero fácil de modelar.

Pon una hoja de papel de horno en la bandeja. Haz bolas de unos 30gr cada una y aplástalas ligeramente, para hacer mantecados de unos 2cm de alto y las vas colocando en la bandeja, dejando espacio entre los mantecados para que se horneen uniformemente. Espolvorea un puñadito de semillas de sésamo, si te gustan.

Precalienta el horno a 220º. Solo debe darle el calor directo por arriba. Coloca la bandeja con los mantecados de la mitad del horno para arriba, y pon otra bandeja debajo, para así "cortarle" el calor directo por abajo. Si tienes horno con calor solo arriba, mejor. Hornea 10 minutos a 220º y otros 5 minutos a 180º, para que no se quemen y se hagan bien por dentro. Y a disfrutarlos con una copita de anis.