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martes, 23 de diciembre de 2014

Troncos de Navidad

Llevo 12 años guardando de recuerdo el menú de nochebuena del hospital Materno-Infantil y el adorno que venía con el postre. Y me he dicho: esta es la ocasión perfecta para utilizar el adorno. Tú lo has encontrado? Pues yo tampoco. En agosto, cuando el adorno navideño salga en alguna carpeta de recuerdos o en algún cajón editaré esta entrada y lo incluiré. ¡De coraje!
Para nochebuena he preparado estos troncos de navidad, uno de chocolate blanco y otro de chocolate al 50% de cacao
La receta  es un poco laboriosa porque tiene cuatro partes, pero ninguna es difícil: crema pastelera, bizcocho, relleno y cobertura. 
Primero se prepara la crema pastelera con un vaso de leche entera, 50gr de azúcar, 2 yemas de huevo, 20gr de Maizena y una cucharadita de vainilla.
Pon en un cazo la leche con la vainilla y mientras se calienta bate el azúcar con las yemas y luego añade la Maizena. Cuando arranque a hervir se vierte la mitad sobre las yemas y se remueve sin parar para que no se cuajen. Una vez disuelta se echa todo en el cazo y se cuece a fuego medio hasta que espese, sin parar de remover.
Luego toca hacer las planchas de bizcocho: 6 huevos, 100gr de azúcar, 60gr de harina + 60 de Maizena y una pizca de canela.
Monta 5 claras a punto de nieve y añade 50gr de azúcar. Aparte, bate las 5 yemas, con el huevo, y los otros 50 gr de azúcar. Añade las claras a las yemas y luego añade las harinas y la canela. Extiende la mitad de la masa en la bandeja del horno (con papel) y hornea a 220º durante 5 minutos o hasta que empiece a dorarse cada plancha, una despues de otra.
Deja los bizcochos con el papel sobre la encimera para que se vayan enfriando. Mientras, monta el relleno. Estos troncos llevan 250gr de nata vegetal, y una vez montada le añadí media tableta de chocolate con leche derretido
 
Empezamos con el montaje: haz un rectánculo con la plancha de bizcocho y úntale una capita fina de crema pastelera, que le dará jugosidad al bizcocho. Luego se le pone el relleno y lo enrollas.

Se enfría el rollo en la nevera mientras montamos la cobertura de ganaché. Luego se unta todo y se le hacen unas marcas con un tenedor, para que asemeje a un tronco. Se pueden añadir unos recortes igualmente rellenos y enrollados, como si fueran unas ramas del tronco
Luego viene lo mejor: adornarlos un poco, como más te guste o con lo que pilles a mano. Para este de chocolate blanco, con el que quiero celebrar de camino el cumple de mi Luis, (y para el que buscaba el adornito de la noche en que nació) he comprado unos bombones con forma de erizo, porque le encantan todos los animalillos, así creo que vamos a triunfar

El corte queda muy chulo, con su espiral chocolateada


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