Creo que lo he escuchado cientos de veces: "ellos van para arriba y nosotras para abajo". Cuando se lo decían a mi madre, yo era de los "ellos", pero ahora soy de las "nosotras". Ou yeah. That's just the way it is. Dichosos los ojos que disfrutan de tan bello espectáculo. Mi sobrino Ramón ya tiene 15 años, y es un chico guapo, inteligente, simpático ¿Quien puede no ser feliz estando al otro lado?
Así que su tita, la loca de las tartas, tenía que hacer algo. Por dentro, red velvet, que hacía mucho que no la preparaba. Va rellena de nata montada y chocolate blanco rallado.
Por fuera chocolate blanco. Sabía que debía poner un 15, y estas banderitas tan monas de Tiger. Pero quería adornarla con algo más, relacionado con la edad. Y de repente vi la luz: ¿no tengo por ahí un cortador con bigotes? Y ahí están.
Estos elefantitos tenía que colarlos en alguna foto, porque me tienen enamoraita. Y este era un buen momento, en recuerdo de cómo eran las cosas hace "solo" 15 años, cuando no había bigotillos en el horizonte.
Para que el 15 quedara en alto, hice un rosetón con lo que quedaba de ganaché de chocolate blanco, y ahí lo clavé
Y aquí una foto del corte, al día siguiente. Está claro que no iba a llevar la tarta abierta a la fiesta. Así que la nata se ha venido un poco abajo, porque el bizcocho absorbe su humedad
MUCHAS FELICIDADES RAMON
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